Así empecé a correr

Comencé a correr a finales de junio de 2005, casi de casualidad. Mi cuerpo necesitaba un cambio, por aquel entonces montaba en bicicleta y esta me llego a obsesionar, así que coincidiendo con el nacimiento de mi única hija Ainhoa cambie la bici por las zapatillas con la intención de preparar mi primera Maratón, San Sebastian 2005, aquella experiencia y sobre todo el buen ambiente de las carreras previas me lleno de tal forma que cambie mis planes, comencé el 2006 en bici y a medidos de enero decidí dejarla definitivamente aparcada y calzarme las zapatillas. lllll


Riki con su hija Ainhoa

Así pues aquel primer año realice cinco Maratones de asfalto y dos de montaña, al año siguiente 2007 decidí dar un paso mas haciendo mis primeras travesías: Barbenas, Monegros, Navarra a la vez de compaginarlas con Maratones y otras muchas carreras.
En 2008 comencé con mis primeros grandes proyectos como la Travesía de la Península y esas 30 Maratones en 30 días en el mes de agosto.


Culminación travesía Tarifa - S. Sebastián (1220 kilometros)

El pasado año 2009 ha sido el año de la explosión con innumerables proyectos como las 150 Maratones en 150 días y la vuelta a la Península que espero completar esta próxima primavera.

Culminacion 150 maratones

Una de las cosas más grandes del 2009 ha sido la nominación por parte del Ayuntamiento de Tafalla a los Premios Príncipe de Asturias de los Deportes 2009 y el lanzamiento del Cohete anunciador de las Fiestas Patronales de Tafalla, algo que solamente pasa una vez en la vida.

Entrega de la nominación príncipe de Asturias

ra mi el correr es algo mas que un deporte, es una filosofía de vida. Me gusta huir de las carreras convencionales y crear mis propios reto y desafíos.
Para ello cuento con un fantástico equipo de apoyo que hace posible realizar estas largas travesías y todos los proyectos.


Equipo de Ricardo Abad

Seguramente que si miramos o buscamos habrá alguna persona en el mundo que haga mas o mejor las cosas, pero a mi nunca me ha gustado fijarme en el resto del mundo si no hacer lo que me pide mi cuerpo y lo que me apetece en cada momento.